08 Jan 2019

Desde el principio de los tiempos, la evolución de la tecnología ha modificado nuestros hábitos, rutinas y entornos de forma constante, y nos es diferente en el mundo de la animación, donde la tecnología ha jugado un papel clave en el desarrollo de la forma artística. Actualmente estamos en la cúspide de otro momento de inflexión en el desarrollo de la tecnología de animación: la tecnología basada en la nube.

Los modelos de producción basados en la nube representan un desarrollo fundamental en la historia de la forma artística, muy similar a otros desarrollos clave en la historia de la tecnología de la animación, como pueden ser:

1917: Cuando Max Fleischer recibió una patente de rotoscopia, una técnica que permitía a los animadores rastrear imágenes de películas de acción en vivo frame a frame para producir una acción realista

Dibujo de la patente de Max Fleischer para rotoscopia de animación.


1932:
Walt Disney creó el primer dibujo animado en color con tecnología “three-strips” titulado Flowers and Trees, utilizando el proceso de Technicolor, que expuso simultáneamente tres tiras de película de blanco y negro, cada una de las cuales registró un color diferente del espectro.

1933: Ub Iwerks creó la primera cámara multiplano utilizando capas móviles de ilustraciones planas antes de una cámara horizontal. La cámara permitió la profundidad de campo y efectos tridimensionales sin precedentes en la animación 2d, y pronto fue empleada por Disney en su primer largometraje, Blanca Nieves y los site enanitos.

La versión posterior de Disney de la cámara multiplano estaba orientada verticalmente y era más
compleja técnicamente.


1962
: Sketchpad de Ivan Sutherland fue el primer programa de ordenador que permitió la manipulación directa de objetos gráficos, un ejemplo pionero de la interacción hombre-ordenador y el antecesor del software CGI de hoy en día.

1972: Ed Catmull y Fred Parke crearon una mano animada por ordenador, uno de los primeros objetos tridimensionales renderizados que fue generado en su totalidad por ordenador.

 

2019: En la actualidad, estamos inmersos en otra gran evolución, que promete cambiar nuestros hábitos, rutinas y entornos. Esa evolución es la tecnología en la nube.

Aunque la tecnología en la nube está presente en nuestra vida cotidiana (Spotify, Gmail, Netflix, etc.), apenas es el principio para tener un gran impacto en la animación, adaptándose a la demanda y necesidades de la industria de la animación de hoy. La tecnología Cloud en la animación reconoce que la gran mayoría de los proyectos de animación son globales, con múltiples actores involucrados en diferentes partes del proceso de producción. El aspecto colaborativo de la animación gana importancia con cada año que pasa, mientras que el tráfico de información crece y la seguridad de esa información se se vuelve más fundamental que nunca.

En estas etapas iniciales de la producción de animación basada en la nube, surgen numerosos competidores de servicios, y el concepto de plataformas de estudios virtuales en la nube varia ampliamente en cada uno de estos servicios.

Simple Animation ha situado su mayor énfasis en la infraestructura, al tiempo que incorpora un poderoso pipeline configurable dentro de su servicio. Simple entiende que los estudios que ya han realizado inversiones en infraestructura con pipelines definidos no puedan cambiar fácilmente su modelo local por otro modelo que esté completamente basado en la nube.

Por lo tanto, Simple ha elaborado algo intermedio; es decir, que los estudios pueden continuar utilizando su infraestructura tradicional, pero con la opción de poder extenderse a la nube durante periodos de máxima producción. Esta alternativa es, en última instancia, la de un modelo híbrido/nube local.

Cómo funciona el modelo híbrido de Simple

Los servicios de nube híbrida de Simple Animation permiten a los estudios implementar su propio pipeline gracias a la herramienta de gestión del pipeline configurable (API) de la compañía dentro de sus estaciones de trabajo locales y sincronizadas dentro de la nube de Simple.

De esta manera, el estudio continúa utilizando su infraestructura local, beneficiándose de un pipeline configurable con la posibilidad de expandirse de forma transparente en la nube.

La computación de la nube híbrida de Simple permite a los estudios desplegar una nube privada local para alojar cargas de trabajo críticas y sensible y utilizar un proveedor externo de nube pública para alojar recursos menos críticos. También es particularmente valioso para cargas de trabajo dinámicas o altamente variables. Por ejemplo, durante los momentos decisivos en torno a la entrega de proyectos, es posible utilizar la nube para acceder a recursos de computación adicionales a medida que aumentan las necesidades.

La tecnología en la nube, sin duda, seguirá evolucionando. Y también lo harán los pipelines de producción de los estudios para aprovechar mejor los numerosos beneficios de la tecnología en la nube. Algunos de estos beneficios incluyen: reducción de costos, ahorro de tiempo, escalabilidad, flexibilidad, seguridad, almacenamiento ilimitado, cobertura global, modelos “pagos por uso” y granjas de render integradas.

Al igual que todas las revoluciones tecnológicas, la nube tardará un tiempo en establecerse completamente dentro del marco de la industria de la animación, pero el cambio está por venir.

Y con Simple Animation, simplemente puede suceder